jueves, 6 de noviembre de 2008

I, corazón, Culiacán.

En Culiacán todo sigue igual. La gente se detiene ante la inmolaridad del tiempo. Todos con sus vidas insoldables, como si no pasara más nada, y quizá sea verdaderamente de esa manera.


Las fiestas, las tardes de café, la vida entre trabajos, ensayos, escuela y la vagancia, sigue igual. A la vuelta de 10 años se habrán agotado las esquinas después de la inminente rotativa en busca de un cambio.

Entonces pienso: que bueno que estoy acá, en Sonora. Aquel ritmo de vida hubiera acabado conmigo. No por el ir y venir, sino por el tedio y la inmutable rutina.

Y la ciudad sí que cambia, por lo menos la escenografía. Puentes, jardines, fraccionamientos, oxxo por todos lados. Se maquilla y reconstruye a si misma como queriendo borrar las huellas digitales del destino violento que le toca cumplir. No así la sociedad que parece ir borrando el olvido.


Y vuelvo a los mismos resultados después de mis cuentas: Culiacán es mágico. Ahora ya no sé si algún día volveré a vivir ahí, pero siempre será un lugar al cual volver para perderme en el tiempo.

4 comentarios:

dehg dijo...

Cada vez que voy a mi natal Córdoba, Ver. me sucede algo similar: me parece un lugar mágico, tranquilo. Me gustaría regresar para morir, porque aquí hay tantas cosas que hacer que no podría hacer allá.

Un abrazo!!

PD: Gracias por ofrecerme el cuarto desocupado de tu casa, y pues es una lástima que éste a chorrocientos km, pero bueno! mientras no me corra el dueño no habrá problema.

B West dijo...

oh, sí... cuando desee vacacionar por acá ya sabe! aquí tiene su cuartito!

Atonatiuh dijo...

Es que Culiacán es raro...
A mí si no me mata la rutina, el tedio y la impotencia que me provoca esta ciudad, me va a matar la gente...
Y si no me mata, probablemente lo contemplaría como un buen lugar para volver... pero a como van las cosas, me aplasta cada vez más y más y cada vez me asfixio más...

Sí, el tiempo esta como detenido, y con eso de que la gente tiene miedo a los cambios, sinceramente me da pánico meter una variable que afecte una pequeña atmósfera de la sociedad, que bien sabes que siendo una sola se riega por toda la ciudad... Pero cada vez siento aguantar menos, y ¿qué le voy a hacer?

Y yo que no he ido para tus lares =P ... espero que el próximo año se preste para... espero...
Besos.

Ruga dijo...

Ash, yo quiero tener nostalgia de algún lado.