lunes, 23 de julio de 2007

¿Qué les cuento?

Me fui a Culiacán el jueves pasado y regresé ayer domingo por la tarde. Fue un viaje muy cansado, a pesar de que tenía una semana con insomnio y mucho trabajo aún así me fui, pensé que alejarme de la ciudad y de la rutina diaria me serviría para conciliar el sueño a mi regreso y así fue. Bueno, ya dormí, ya descansé, paseé, ahora voy a hacer una breve semblanza de lo que fue el viaje.

No es mal viaje pero no me divertí como pensaba, y no, no tiene nada que ver con Diana. El insomnio y el cansancio me alcanzaron allá. La mitad del día la invertía en medio dormir y ver para donde me iba en la tarde, total que pocas cosas de las que tenía planeado hacer, hice.

La ciudad bella como siempre, los amigos entrañables, una compañía exquisita, todo maravilloso, pero andar cansada y todos los días acostarme a las 7 de la mañana y dormir sólo 3 o 4 hrs. si fue exageradamente cansado, al grado de llegar a agotarme, de milagro pude llegar caminando a mi casa. No daré más detalles del viaje, no por ahora, quizá después me anime y hablé un poco más del tema. Lo que me urge es cambiar de rutina, no conectarme a la interné de noche e incorporar más actividades físicas en el día para poder dormir bien de noche, si no me voy a enfermar. Ya ando pensando en dos tres cosas que puedo hacer que me van ayudar muchísimo para alivianarme. Por ahora me urge atender mi problema con las ojeras horribles que me cargo, no es nada agradable.

Espero pronto poder despabilarme y regresar a dos tres blogs que no he checado y dos tres firmas que debo por ahí a mis fieles amigos. Ya saben que los leo pero no os desesperéis, ya prontito regreso al 100.

Besazos a los que aún me leen.

Mua mua mua.

PD: Mi FRASE de la semana es: "DOS-TRES"

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